La evocadora procesión de los Misterios con los antiguos cantos de Montescaglioso

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Tradición, memoria y sagrado, un Viernes Santo que celebra los ritos de Pascua en Montescaglioso con la procesión de los Misterios con cantos antiguos.

Al atardecer, en el centro histórico de un maravilloso pueblo de Basilicata que está en los recuerdos e historias de los abuelos de Montescaglioso, se compone una lenta procesión que se abre desde las diversas iglesias con los «Mamuni», encapuchados con coronas de espinas en la cabeza. Les siguen las Cofradías con sus trajes tradicionales y el Clero. De las respectivas iglesias salen las estatuas de los Misterios, que corresponden más o menos a las Estaciones del Vía Crucis.

Hay cuatro cofradías de Montescaglioso que participan en la procesión con una o más estatuas. Me pregunto si te acuerdas de la que asistió tu familia.

La primera estatua que se saca de la Iglesia de San Rocco es la de Nuestra Señora de los Dolores. A continuación, se pasa a las otras iglesias, de las que se extraen otras cinco estatuas diferentes que representan los diferentes momentos de la Pasión: Cristo atado a la columna, Cristo rescatado por la Verónica, Cristo crucificado, la Piedad y Cristo muerto. Seis estatuas, llevadas a hombros por los devotos, y Nuestra Señora de los Dolores, detrás de la cual la banda de Montescaglioso canta marchas fúnebres.

Tras el primer tramo, la procesión hace su primera parada en la Iglesia Matriz. Mientras las estatuas se preparan para entrar, el coro polifónico de la parroquia «San Pedro y San Pablo», formado por unos 50 elementos, junto con la orquesta de cámara, canta los antiguos cantos. Los cantilene son canciones compuestas entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, ya sea sobre textos en los que la Madre llora por su Hijo o sobre textos de «Las Siete Palabras de la Agonía de Nuestro Señor Jesucristo en la Cruz» de Pietro Metastasio o algunas estaciones del Vía Crucis del Padre Serafino Marinosci sobre un texto, también de Pietro Metastasio.

El programa, con algunas adaptaciones, se repetirá en la Iglesia de Santa Lucía para concluir con la última actuación en la Iglesia Matriz. La procesión finaliza a altas horas de la noche con el regreso de las estatuas a cada una de las iglesias donde se encuentra la respectiva Cofradía.