Era una fría mañana de 1927, cuando Michele Giocoli llegó a Ellis Island con su madre Maria Modarelli, después de un viaje transoceánico de ocho días.
Había partido de Colobraro en Basilicata a la edad de siete años para reunirse con su padre Pasquale, emigrado como obrero siderúrgico a Ohio seis años antes, después de haber estado en el frente durante la Primera Guerra Mundial.
Embarcado a bordo del Conte Biancamano desde el puerto de Nápoles con un billete en clase turista, Michele contará minuciosamente en sus memorias los momentos de ese viaje: desde la salida nocturna de Colobraro para llegar a Nápoles hasta la primera vez que probó un helado durante la travesía; por el paso cercano de otro barco en la dirección opuesta y su ensordecedor silbido que años después todavía podía oír con consternación; hasta esa mañana en que vio en la distancia la Estatua de la Libertad junto al puente lleno de gente exultante.
Y fue precisamente a la sombra de la Estatua de la Libertad, durante los controles fronterizos, que Michele, registrado como Michael Jocola, fue dolorosamente separado de su madre y puesto en cuarentena. Conducido a un ala del hospital lleno de niños de diferentes nacionalidades, esperó durante mucho tiempo el regreso de su madre que lo esperaba con su padre en la gran waiting room di Ellis Island. Siempre recordará la primera vez que conoció a su padre y la vergüenza que sintió ese día hacia un hombre aún desconocido.
Michael y su familia vivieron en Ohio, en 303 West Federal Street en Niles.
En enero de 1994 dio una entrevista a Kate Moore del Servicio Nacional de Parques para la Historia Oral de Ellis Island, un proyecto que tiene como objetivo recoger y mantener los testimonios orales de los emigrantes que llegaron a América.
Entre las 2.000 entrevistas realizadas a pasajeros, familias y funcionarios del centro de inmigración, está el audio original y la transcripción de aquel 4 de enero de 1994, cuando Michael, abriendo las puertas de sus recuerdos, contaba su infancia en Colobraro, la vida de barrio, las tradiciones religiosas y, en particular, las navideñas, su familia italiana y su casa situada en Vico Cristoforo Colombo.
Después de 96 años, sus hijos Jan y Michael Jocola regresan a Colobraro para descubrir sus raíces y el lugar de origen de su familia. Han regresado a esa casa descrita en los registros de Ellis Island, cuyo camino se remonta a la vida del navegante que primero llegó a América, al igual que su padre.
Se organizó una gran fiesta de barrio para los Jocola y para su regreso a Colobraro.
Puede escuchar la entrevista en el sitio web oficial de Ellis Island:https://heritage.statueofliberty.org/oral-history-library